Un día, esta luz blanca
se extenderá
a todos los rincones
de la vida,
a cada corazón,
a cada Ser.
En los ojos
de todas las personas
brillará,
en las manos
de cada ser
ofrecerá su calor.
De todas las sonrisas
desprenderá
su pacífica energía.
Esta luz blanca inundará
la vida,
será la vida misma.
Y al que le quede memoria
de este presente,
dará gracias.
Un día,
toda la complejidad se unirá
en el blanco de esta luz,
como el espectro de color.
No habrá misterio ni oscuridad.
Esta luz blanca, maravillosa,
invadirá las memorias,
los corazones, los genes,
cualquier otra existencia.
Cogidas de la mano,
la vida y la esencia lucirán
un único vestido blanco.