En los días grises,

yo me preguntaba.

Con tu gris mirada,

con grises palabras

y esa gris respuesta,

me dejaste gris,

gris y abandonada,

con la piel tan fría

que casi temblaba.

En los días grises

que vivo callada,

que vivo tan sola,

esta gris distancia,

se vuelve una losa,

un muro de piedras

grises y alineadas.

En los días grises,

sólo con vacío

tú me alimentabas.

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